Muchos padres tienen miedo a la crítica social

Hay diferentes formas de agresión, por lo que cada una deberá tratar de una manera determinada. No es lo mismo que se produzcan insultos en el entorno familiar que se haya dado un intento de parricidio, explica el fiscal de menores de Tarragona, Ignacio Monreal. Lo que sí se debe tener en cuenta es que la conducta anómala de los menores debe corregirse cuanto antes, prosigue.

Es importante que los padres no se avergüencen de la conducta de sus hijos y hablen sobre la situación, dice la abogada Núria Sabat. Muchos de ellos tienen miedo da la crítica social, que se les acuse de no ser buenos padres, de no saber educar a sus hijos, continúa. Pero si no se toman medidas, la actitud del menor no se podrá corregir.

Algunos psicólogos han encontrado con casos en que los padres han manifestado que no pueden hacer nada con sus hijos.

Primero se intenta solucionar el problema mediante el diálogo y bajo su supervisión de un especialista. Si esto no funciona, el útlimo recurso, por muy doloroso que sea es presentar una denuncia. añade la abogada Nuria Sabat. Si no se ponen cartas sobre el asunto, la misma violencia que se ha asentado en el entorno familiar puede degenerar en la escuela

Una vez tramitada la denuncia, se puede evitar que llegue a juicio. En la Fiscalía de Menores, los técnicos estudian cada caso y intenatn intervenir y solucionar el problema entre los niños y sus progenitores.

Si lo ocurrido se puede cerrar en un simple seguimiento, fantástico, sigue la mediadora familiar Núria Sabat. El psicólogo podrá visitar regularmente la vivienda familiar para ver la evolución dle niño.

Si no es posible, lamentablemente, se iría a un juicio, que en los casos más graves podría conllevar el internamiento del menor. Sin embargo un padre no puede renunciar a la custodia de su hijo si éstte es menor de edad. La única posibilidad es que la Generalitat asuma la tutela o la potestad del menor, añade Sabat.

Esta situación sólo se produce si se demuestra la negligencia de los padres en la educación del niño. Y a las agresiones de menores a sus padres, no siempre es así.

A partir de los 18 años desaparece la custodia. Vía civil se puede fijar por sentencia un plazo para que el menor busque medios de vida y marche del domiciol familiar. Los padres no puede tener la espada de Damocles toda la vida, sostiene Núria Sabat.